¿Por qué debería hacer un plan? 

Esta pregunta es una pregunta razonable a nuestros ojos, ya que no estamos de acuerdo con el mantra de hacer las cosas porque sí. Es por eso que en este artículo explicaremos el porqué de la utilidad de un plan para tu empresa. 

¿Qué es un plan?

Un plan es como un mapa, una hoja de ruta. La esencia de un plan es describir el camino entre un punto A hacia otro punto B y lograr ubicarlo claramente en el espacio y en el tiempo. Puede parecer una obviedad, pero esto no es poca cosa. 

Parálisis de decisión 

La parálisis de decisión es un fenómeno científicamente comprobado cuyo efecto es el de imponer la inmovilidad ante la multiplicidad de opciones y la incapacidad de poder tomar decisiones al respecto. 

Una de las primeras y más evidentes ventajas de cualquier plan radica en ser este un antídoto contra la parálisis de decisión. Tomarse el trabajo de ubicar el camino elegido en un marco espacio temporal no es más que inmortalizar una decisión por escrito. Tomar decisiones es completamente fundamental para intervenir en la realidad y el redactar un plan presupone haber pasado por este proceso. 

planificación

Eficiencia

Otro de los motivos por los que redactar un plan es una buena decisión es el hecho de que un plan genera un espacio de reflexión y posterior decisión el cual permite evaluar distintas opciones en un marco explícito y adecuado. 

Improvisación

La improvisación nos ahorra el momento de tener que explicitar nuestras opciones de antemano y balancear sus pros y sus contras. 

Es de esta forma que un plan proporciona un antídoto contra la improvisación, ya que genera un espacio en el cual comparar previamente los distintos caminos posibles. El resultado de esta reflexión suele ser muy esclarecedor es por eso que la redacción de un plan es conveniente para cualquier proceso que pudiera adolecer de las desventajas de la improvisación. 

Feedback 

La realidad es cambiante, más en tiempos de extrema globalización digital, y es por eso que un plan debe tener contemplado la incorporación constante de feedback. Si un plan es un mapa, y si un mapa debe reflejar una topología en el mundo, y, si decimos que dicho mundo es cambiante, es solo natural asumir que un buen plan tiene que tener dentro de sí mismo las herramientas para mutar y adaptarse a este mundo líquido. 

Indicadores

Un indicador es un parámetro medible que, sumado a otros, conforman la descripción desagregada de un fenómeno complejo. La necesidad de feedback de un plan nos obliga a desagregar fenómenos complejos en parámetros empíricos medibles.

La necesidad de feedback es otra ventaja de la redacción de un plan, ya que nos enfrenta con la necesidad de desagregar fenómenos confusos en parámetros medibles, aumentando nuestra comprensión y nuestro control sobre los procesos involucrados en nuestro trabajo. 

Conclusión

Un plan es un sinceramiento, y, como ocurre con la terapia, dejar de meter las cosas debajo de la alfombra es siempre el primer paso para tener éxito. No hay que escaparle al papel y al lápiz. Un plan es una hoja en blanco que nos interroga como un espejo y nos permite llenarnos de humildad y realmente tomarnos el trabajo de desarmar nuestros procesos y discutirlos. 

Tomar decisiones es el comienzo de un camino cuyo final es el perfeccionamiento de los errores y, en última instancia, la sofisticación de los procesos y el aumento del valor de nuestro trabajo.

Send this to friend