Inicio este post lanzando una serie de preguntas:
¿Somos los españoles productivos?
¿Soy yo productivo?
¿Puedo llegar a ser más productivo?
¿Qué consigo siendo más productivo?
Pero, creo que antes de responder a estas cuestiones, es mejor definir lo que NO es la productividad. Productividad NO necesariamente es:
–Trabajar más horas. Si fuese así los españoles seríamos los más productivos de Europa. En unas recientes estadísticas trabajamos al año
–Ganar más dinero. Ser productivo no significa ganar más dinero. Sin embargo ser productivo implica llevar a cabo cosas que produzcan mayores resultados. No es lo mismo pero muchas veces puede estar relacionado.
–Ser extremadamente disciplinado. Ser disciplinado está bien, pero si uno se pasa puede llegar a causar stress. Y muchas veces hace que nuestras tareas no sean satisfactorias, y que estemos obligados y no motivados. No nos va a proporcionar felicidad.
–Perderse las cosas buenas por estar trabajando. El objetivo de la productividad es obtener excelentes resultados con el mínimo esfuerzo para poder tener más tiempo y emplearlo en equilibrar tu vida, disfrutar de las cosas más importantes.
Ahora vayamos a contestar las preguntas formuladas al inicio.
La primera ya la he contestado en el primer punto de lo que NO es la productividad.
La segunda, la respuesta la tiene que dar cada uno, pero creo haberte dado ya pistas. Si soy de los que obtienen grandes resultados con el trabajo mínimo posible, y soy capaz de ser feliz en mi vida, esa es tu respuesta.
La tercer cuestión, es clara, ¿quién no puede llegar a ser más productivo, optimizar su tiempo y conseguir mayores resultados?, ahorrando tiempo para cubrir las otras cosas importantes en tu vida, que son las otras áreas de tu vida: Familia, amigos, salud, desarrollo personal, etc.
Respecto a la pregunta de lo que consigo siendo más productivo, también ha quedado claro: mayores resultados, más tiempo para hacer las otras áreas de mi vida y en definitiva ser feliz.
Pero, he titulado este post como “Productividad Inteligente”, ¿de qué hablo?
Nuestra mente es como un disco duro, se le va metiendo información, y más información, es como si tuvieses un disco duro en tu cerebro.
Si tienes tantísimas cosas en tu mente, éste al final se estresa, se bloquea, se colapsa, no sabe qué tarea hacer primeo, y cuál después……un caos.
Mi propuesta es la siguiente:
1-Haz una lista de todas las tareas que se te ocurran, tienes que vaciar tu mente, tu disco duro, libéralo. Pon todas las tareas en una libreta o en una aplicación o app.
Te sentirás aliviada, limpio, como nuevo. En esta lista ponlo todo, no sólo las tareas relacionadas con el trabajo, todo. Tu escribe, escribe…..Tienes que llegar al punto que tu cerebro no tiene nada guardado, todo lo tienes escrito, acabas de resetear tu cerebro, al igual que si fuese un disco duro. Te sentirás como nuevo, aliviado, más libre.
2-Básicametne todas las tareas que existen pueden clasificarse en tres tipos:
–TAR. Tareas Alta Rentabilidad
–TGD. Tareas Gestión Diaria
–TBR. Tareas de Baja rentabilidad
El paso número dos, es clasificar tu lista en según el tipo de tarea.
3-El tercer paso, ahora que ya tienes tus tareas y ordenadas en según tipo de tarea, consistirá en trabajar en tus TAR, eliminar tus TBR, y hacer las TGD cuando termines tus TAR, o en algún momento del día que consideres oportuno para afrontar estas tareas. Ten claro que lo que realmente te va a dar resultados es hacer tus TAR.
4-Dentro de tus TAR, tienes que aprender a priorizar. Tendrás que tener claro qué TAR haces primero, qué TAR después, y así. Pero eso ya te lo explicaré otro día.
Y con esta sencilla fórmula, te convertirás en una persona que estará trabajando inteligentemente y será mucho más productivo.
Te animo a que hagas este ejercicio, y verás los resultados.
Nosotros, desde DFV, te podemos ayudar a ti y a tu organización a implantar nuestro sistema de trabajo OMT, soportado por nuestro software que cambiará la manera de trabajar en las personas de tu organización.